Desvaríos...

El día menos pensado lo sabrás, ojalá no sea demasiado tarde y yo aún lo recuerde.

Necesito que tus silencios sean más escasos y que tu presencia sea más frecuente.

Absolutamente nada es absoluto.

lunes, 20 de octubre de 2008

Y después…


Mi vida anterior a ti, era eso: anterior a ti.
Porque después de ti,
empecé a entender el mundo desde tus ojos,
a descubrir la vida desde tus manos,
a sentir el amor desde tu piel.

Después de ti no hay después,
es solo un antes que estuvo vacío
con una colección de inconformidades
y una constante muestra de inseguridades.
Una vida que llegó a su clímax al verte llegar.

1 comentarios:

La oveja magenta dijo...

Justo entré a tu blog mientras por fin me llegaban las tan esperadas y postergadas fotografías de Buenos Aires, mi Buenos aires querido y querible.
Y quizá por la emoción recobrada y el remate de tu entrada, me eché a llorar, con tanta alegría como nostalgia.
Así, da gusto derramar lágrimas.

Besote gordo